22 enero 2018

MIFID II: Más protección y mayor asesoramiento para el cliente, inversor o ahorrador

MIFID II: Más protección y mayor asesoramiento

La directiva de Bruselas MIFID II entró en vigor el pasado 3 de enero buscando dotar de mayor transparencia al sector de la inversión y los productos financieros y, de esta forma, solventar los errores que se presentaron durante la reciente crisis financiera.

 

Sus objetivos son claros: crear un mercado único de servicios financieros en la Unión Europea, asentar un marco de regulación común y fomentar la transparencia y la seguridad en la contratación de productos financieros.

 

¿Pero cómo afecta esta directiva? El cliente, inversor o ahorrador estará más protegido y mejor asesorado con mayor y mejor información.

 

Cuando un cliente vaya ahora a su banco o entidad financiera, sabrá si su entidad vende o asesora. Es decir, si le ofrece unos productos para que pueda elegir o si realiza propuestas personalizadas según objetivos y necesidades del cliente. Los asesores financieros tendrán que tener una certificación específica sobre economía y finanzas y, como mínimo, seis meses de experiencia previa antes de desarrollar su actividad profesional de manera autónoma.

 

Se busca, por tanto, potenciar el asesoramiento personalizado y especializado. Las entidades tienen que definir el perfil inversor del cliente y sólo se le ofrecerán productos que respondan a sus necesidades. Asimismo, se pretende que el cliente tenga más información, y dejarán claro qué comisiones tienen los productos y quién las cobra.

 

Por su parte, los mercados financieros y sus productos estarán más regulados, con un aumento del control sobre ellos. La negociación de títulos y productos se hará en plataformas de negociación multilaterales y la transparencia en los mercados crecerá dotando de mayor confianza a los inversores.

 

Además, todo esto se plasma en que aparece una categoría de mercado nueva, Organised Trading Facilities (OTF), para los instrumentos como bonos, derivados, productos estructurados… Aumentan los requerimientos a los operadores financieros con una mayor intervención de los supervisores que contarán con capacidad para prohibir ciertos productos o actividades financieras, al mismo tiempo que aumentan las sanciones en caso de recurrir a ellas.

 

Borja Roibás

Profesor en EUDE Business School de MBA especializado en el área financiera

No hay comentarios

¿Quieres comentar la noticia?

Si quieres personalizar tu avatar, click aquí.
Tu dirección de correo electrónico no será publicada.
Los campos obligatorios están marcados con *
Recuerda que los comentarios deben ser revisados por un administrador.