14 diciembre 2020

Liderazgo Pro-Activo VS Liderazgo Re-Activo por el Docente en Habilidades Directivas, Daniel Benjumea

Liderazgo

Para poder ejercer un Liderazgo real, en necesario enfrentar diferentes aspectos relacionados con la forma de integrar dicho liderazgo dentro de las Organizaciones. Uno de los aspectos a tener en cuenta es saber el nivel en el que estamos liderando. Para que podamos entender el contexto del que estamos hablando, debemos establecer tres niveles de dirección dentro del liderazgo:

 

  • Liderazgo de primer nivel

El Líder hace lo que quiere o puede en función criterios propios no basados en la estructura organizacional o procesos de la misma. Este liderazgo es el que en muchas ocasiones se considera autoritario, y se asocia a un líder no consultivo.

 

  • Liderazgo de segundo nivel

El Líder lidera en base a criterios externos, normas, cultura y buen clima laboral. Este tipo de liderazgo, es lo que podría denominarse un liderazgo complaciente en el que el líder se acoge a normas y procedimientos, acomodando a los intereses del staff de mando.

 

  • Liderazgo de tercer nivel

Es aquel en el que el Líder rompe normas y procedimientos. Se muestra como un líder transgresor que va más allá de las normas y resultados provocando cambios en el ecosistema y en la organización.

 

Estos tres niveles nos dan la radiografía de tres tipos de liderazgo totalmente diferentes y diferenciados entre sí: 

Digamos que el Líder de primer nivel, “hace y deshace lo que quiere”, no le importan las consecuencias negativas en la organización y el sistema y tiene una baja conciencia del impacto a largo plazo de sus decisiones.

 

El Líder de segundo nivel, “hace lo que los demás quieren que haga”, es un líder voluble e influenciable que no asume riesgos y no cuestiona procedimientos por lo que se limita a administrar en un estado de falso bienestar cultural.

 

El Líder de tercer nivel, “hace lo que es beneficioso para el avance”, es un líder que cuestiona procedimientos, protocolos y pautas de actuación. Un líder que no teme ser juzgado o criticado por la realización de acciones que rompen normas y viejos paradigmas dentro de la organización.

 

Es necesario entender que cada nivel de dirección y liderazgo es necesario en la medida en que sepamos combinarlos ya que ninguno de los tres por si sólo daría buenos resultados en la continuidad del tiempo. Saber balancear cada uno de los niveles y entrenar las competencias para poder desarrollarlos a su máximo potencial dotará a los cargos directivos de más capacidad de trabajo, menos estrés y más acción.

 

En la siguiente tabla, pasamos a definir algunas de las competencias que debería desarrollar cada nivel para poder ser aplicado de forma correcta.

 


En cualquiera de los tres niveles de Liderazgo, hay que tener en cuenta que el factor clave es la “autoestima” y “autoimagen” que profese el Líder para consigo.

 

Este factor es el que realmente va a determinar la capacidad de adaptarse a la hora de aplicar uno u otro nivel de acción ya que en los tres casos va a ser necesario que el Líder enfrente y se enfrente a situaciones y personas que pueden hacer que este tambalee en sus decisiones y acciones por lo que se denominaría “la soledad del mando”.

 

Este concepto es temido por mucho líderes en las organizaciones y es por ello que se vuelven complacientes en su gestión haciendo prevalecer las relaciones sociales por encima de los principios y valores de la propia organización. Por lo tanto es importante que todo líder dentro de una Organización o Sistema, entienda y comprenda la importancia de manejar estos niveles y las relaciones que se derivan de ellos ya que en los tres casos la forma de interacción entre los equipos de trabajo y los líderes va a variar de forma muy significativa.

 

En nuestros programas y planes de formación trabajamos estos conceptos y contenidos de tal forma que dotamos a nuestros alumnos de las herramientas necesarias para que aprendan a gestionar desde estos tres niveles, bajo principios y valores organizacionales ordenados en la consecución de los mejores resultados para la compañía.

 

Daniel Benjumea

Daniel Benjumea Aparicio

Docente en Habilidades Directivas 

www.desarrolloyliderazgo.com

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